Miguel Claro es un fotógrafo profesional, autor y comunicador científico con sede en Lisboa, Portugal, que crea imágenes espectaculares del cielo nocturno. Como embajador fotográfico del Observatorio Europeo Austral y miembro de The World At Night y el astrofotografo oficial de la Reserva Dark Sky Alqueva, se especializa en “Skyscapes” astronómicos que conectan la Tierra y el cielo nocturno.
La hermosa Nebulosa del Corazón, también conocida como IC 1805, es una nebulosa de emisión brillante y roja con una forma que se asemeja a un corazón humano.
Esta nube cósmica brilla en rojo porque está llena de gas de hidrógeno ionizado. Los carriles oscuros de polvo interestelar crean una silueta oscura en el centro del contorno luminoso en forma de corazón.
Situada a unos 7.500 años-luz de la Tierra, la Nebulosa del Corazón reside en el brazo de Perseo de la galaxia de la Vía Láctea, en la constelación de Casiopea. La sección más brillante, un nudo en forma de pez en la cúspide del corazón, fue descubierta antes que el resto de la Nebulosa del Corazón y se clasifica por separado como NGC 896, o la Nebulosa de Fishhead.
El resplandor rojo de la nebulosa y su peculiar forma son el resultado de la intensa radiación que emana de un pequeño grupo de estrellas cerca del núcleo de la nebulosa. Conocido como Melotte 15, este cúmulo contiene unas pocas estrellas supergigantes jóvenes, calientes y de color azul brillante casi 50 veces la masa de nuestro sol. Estas estrellas tienen sólo 1,5 millones de años. (Para comparación, nuestro sol tiene unos 4.600 millones de años). Muchas más estrellas tenues que son sólo una fracción de la masa de nuestro sol también residen en este cúmulo.
El viento estelar, o el flujo de partículas cargadas que fluyen hacia afuera desde las estrellas recién nacidas, ha esculpido la forma de la Nebulosa del Corazón empujando sus nubes de polvo y gas hacia afuera desde el núcleo.
Para capturar esta imagen de la Nebulosa del Corazón, utilicé un telescopio refractor Takahashi FSQ-106ED con un soporte autoguiado EM-200 y una cámara de astrofotografía Canon EOS 60Da DSLR. La cámara se programó para disparar con un ajuste ISO de 1600 y un tiempo de exposición de 210 segundos. El compuesto final combina 12 fotogramas con un tiempo de exposición combinado de 42 minutos. El procesamiento de imágenes se completó con PixInsight 1.8 y Adobe Photoshop CS6.
