Cómo funcionan los misiles balísticos intercontinentales

Los misiles son municiones autoguiadas que viajan a través del espacio aéreo o el espacio ultraterrestre hasta sus objetivos. Un misil balístico viaja a lo largo de una trayectoria suborbital. Un misil balístico intercontinental puede viajar una distancia considerable alrededor de la Tierra hasta su objetivo.

A diferencia de las bombas, torpedos y cohetes, los misiles son propulsados y guiados. Si no es guiado, se le llamaría cohete. Una bomba no tiene potencia ni guía. Una bomba guiada se llama bomba “inteligente”. Si se alimenta y viaja bajo el agua, se denomina torpedo.

Los misiles se clasifican según su alcance

Alcance del campo de batalla (BRBM): menos de 124 millas (200 kilómetros)

Táctico (TAC): entre 93 – 186 millas (150 – 300 km)

Corto alcance (SRBM): menos de 621 millas (1.000 km)

Teatro (TBM): entre 186 – 2.175 millas (300 – 3.500 km)

Alcance medio (MRBM): entre 621 – 2.175 millas (1.000 – 3.500 km)

Alcance intermedio (IRBM) o largo alcance (LRBM): entre 2.175 y 3.418 millas (3.500 – 5.500 km)

Intercontinental (ICBM): mayor de 3.418 millas (5.500 km)

El Minuteman 3 ICBM de EE. UU. es un impulsor de tres etapas. La carga útil es una sola ojiva nuclear W62 con un rendimiento de 170 kilotones. El impulsor coloca la ojiva en una trayectoria suborbital. A su altura, el vehículo está fuera de la atmósfera terrestre.

El vehículo de reentrada de la ojiva cae a través de la atmósfera hasta su objetivo. La detonación puede ser una explosión de aire o de tierra.

Un vehículo lanzador capaz de orbitar un satélite que circunda el mundo también puede utilizarse para enviar una ojiva nuclear a cualquier punto de la superficie terrestre.

Las primeras misiones orbitales tripuladas soviéticas y americanas utilizaron ICBM modificados como vehículos de lanzamiento.