La NASA traza metas para un posible aterrizaje en la Luna Europa de Júpiter

Según los científicos, la máxima prioridad de una misión robótica de aterrizaje en la Europa de la luna, que posiblemente sustentará la vida de Júpiter, debería ser investigar la composición y química de su océano subterráneo.

Tal misión también debería apuntar a determinar el grosor y la dinámica de la capa de hielo de la luna y caracterizar la geología de la superficie de Europa en detalle, informa un “equipo de definición científica” designado por la NASA en un nuevo estudio en la revista Astrobiology.

“Si un día los humanos envían un módulo de aterrizaje robótico a la superficie de Europa, necesitamos saber qué buscar y qué herramientas debe llevar”, señaló en una declaración el autor principal del estudio Robert Pappalardo, del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena, California.

“Todavía se necesita mucha preparación antes de que podamos aterrizar en Europa, pero estudios como estos nos ayudarán a centrarnos en las tecnologías necesarias para llegar allí, y en los datos necesarios para ayudarnos a explorar posibles lugares de aterrizaje”, añadió Pappalardo.

Los científicos están ansiosos por saber si el enorme océano subterráneo de Europa alberga vida extraterrestre

Pappalardo y sus colegas recomiendan además que cualquier módulo Europa sea capaz de perforar hasta 4 pulgadas (10 centímetros) en el hielo de la superficie lunar. La recolección de muestras subterráneas de diferentes profundidades ayudaría a los científicos a comprender la composición del océano y a determinar cómo se ve afectado por los altos niveles de radiación que bombardean la luna helada, escriben.

El equipo también sugiere un modelo de carga útil para un módulo de aterrizaje Europa que consiste en siete instrumentos científicos: un espectrómetro de masas, un espectrómetro Raman, un magnetómetro, un paquete de sismómetro multibanda, un sistema de imágenes de sitio, un visor microscópico e imágenes de reconocimiento.

“Este modelo de carga útil pretende ser una prueba de concepto que represente la gama de posibles instrumentos que podrían utilizarse para investigar Europa in situ”, escriben los científicos en el estudio, destacando que sería necesario un reconocimiento exhaustivo de la luna para elegir un lugar de aterrizaje seguro y adecuado.

Astrobiólogos les encantaría dejar caer un módulo de aterrizaje en Europa

A los astrobiólogos les encantaría dejar caer un módulo de aterrizaje en Europa, una luna de 1.900 millas de ancho (3.100 kilómetros) que se considera quizás el candidato más probable en nuestro sistema solar para albergar vida más allá de la Tierra. Pero tal misión aún no está en los libros de la NASA, ni en ningún otro lugar.

La Agencia Espacial Europea está liderando una misión llamada JUICE (abreviatura de JUpiter ICy moons Explorer), cuyo objetivo es lanzar una sonda hacia el planeta más grande del sistema solar en 2022.

La nave espacial JUICE alcanzaría el sistema Jovian en 2030 y pasaría al menos tres años estudiando Júpiter, Europa y sus satélites hermanos Callisto y Ganymede. Pero la sonda no aterrizaría en ninguno de estos mundos.